Año 1995, La Serenísima era la mayor empresa alimenticia del
país, ya jugaba a lo grande en el mercado con publicidad en radio, televisión y
gráfica. Como si esto fuera poco apostaron a un innovador método: un dirigible para apoyar el
lanzamiento de una nueva línea de yogures con Lactobacilus GG.
Vuelo Aventura, empresa de publicidad y eventos con globos aerostáticos
y dirigibles, fue la responsable de la hazaña, confirma que La Serenísima fue
la primera empresa que operó un dirigible publicitario en la Argentina. La
campaña generó un incremento superior al 35% en las ventas a los seis meses de
iniciar el primer vuelo, permitiendo el re-pago de la inversión en pocos meses.
Organizaron concursos para pasear a bordo u obtener un dirigible
inflable en miniatura:
“¿Viste el dirigible de La Serenísima? Además de verlo podés tenerlo! Porque llevando al centro de canje más cercano 5 tapitas de yogur, leche cultivada, postres Serernito y Ser o las figuritas que podés recortar de las salchichas Granja Iris + $2, te llevás un fabuloso dirigible inflable. ¡Apurate porque los dirigibles vuelan!”
El dirigible también volaba de noche, tenía dos letreros luminosos en los costados donde se veían diferentes textos. Con 4 colores, 8500 luces programables y operables desde la góndola, se podía leer a más de un kilómetro y medio de distancia.
En un principio, de un lado estaba el logo de la empresa rojo con líneas verdes y del otro lado una leyenda que decía “TOMÁ YOGUR CON GG”. Posteriormente el logo fue verde, ambos modelos fueron pintados a mano y el blanco del fondo podría asociarse a los productos lácteos, pero en realidad era dióxido de titanio aplicado sobre el poliuretano, como cobertura de protección, por los efectos de los rayos ultravioletas del sol y reducir también la fuga de helio.
“Motor1 Argentina” realiza contenidos tecnológicos, son
consultores para proyectos audiovisuales especializados en temas de transporte,
movilidad e industria automotriz con intervención en columnas para medios gráficos,
online y televisivos.
En esos años se comenzaba a usar la integración digital de
imágenes de calidad y Motor1 Argentina, con la dirección de Carlos Alberto
Pereyra (productor audiovisual, redactor de contenidos tecnológicos y diseñador
industrial) y las fotografías de FreddyCam, llevó a cabo la construcción de una
maqueta del dirigible para la producción de cine publicitario. Era necesario
filmarlo en estudio, con buena luz y movimientos de cámaras, para insertar al
dirigible en entornos urbanos, en un determinado punto de la ciudad, a una hora
específica y en una determinada posición. Hubiese sido imposible conseguir una precisión
geográfica- temporal con el dirigible real, ya que el comportamiento de la aeronave
dependía del viento.
Se hicieron capturas fotográficas del dirigible real para
conseguir las medidas, había que caminar bastante para tener cuadro y sin distorsión
en los casi 60m de largo, hicieron los planos, las plantillas y con este
material se dirigieron a Héctor Richetti, un boxeador y experto en tallado de
poliuretano expandido (Telgopor), de Chacarita. Una vez terminada la llevaron
al taller y con rodillo le colocaron membrana vinílica pesada, generando un
aspecto áspero y semimate. Aplicaron la gráfica, las tres franjas verdes de los
laterales, las letras autoadhesivas, la cabina, las góndolas, los motores y se
terminó, en tiempo y forma.
Se filmó la publicidad:
“No se sabe bien porque, pero hay cosas que son importantes,
porque sirven para soñar, para volver a ser chicos, para tener algo memorable
para contar, para hablar con una chica en la cola de un banco, para
contemplarlo abrazando alguien, para alzar a un nieto, para no estar solos, para
mirar para arriba, levantemos la mirada… siempre. Es un deseo de La Serenísima”.
59,13m de largo, 19,20m de ancho, 20,42m de alto equivalente
a un edificio de 6 pisos. Modelo SKYSHIP 601HL, fabricado por Airship Industries, matriculado N601LP. Equipado
con dos motores Porche ubicados dentro de la góndola barquilla, eran enfriados
por aire y alcanzaban una velocidad máxima de 99,7 km/hs.
Tenía empuje vectorial con hélices de 5 aspas reversibles de paso variable y la
transmisión- reducción era la adaptación del sistema de rotor de cola de los
helicópteros Westland Lynx. Utilizaba combustible aeronáutico Avgas 100 LL y
como no se producía en el país, lo traían especialmente para esta aeronave.
Los 6666 m3 de helio, almacenado en cilindros similares a
los de oxigeno que se encuentran en los hospitales pero más grandes, le daban
una autonomía de aproximada de 17hs ininterrumpida de viaje entre los 300 y
500 metros de altura. Tenía dos cámaras de aire, una en la parte
de adelante y otra en la parte de atrás, que es más pesado que el helio y
ayudaba al dirigible tanto para subir como para bajar.
Fabricado en EEUU y armado en una enorme instalación en San Nicolás, Bs. As. Argentina, donde expertos inspeccionaron el globo minuciosamente por dentro y por fuera. La cabina de mando tenía moderna tecnología y fue íntegramente testeada antes del primer vuelo.
El parabrisas era amplio y dividido, en el área de pasajeros había ventanas ovales amplias y cinco asientos, por lo tanto, podían subirse 5 pasajeros y 2 tripulantes.
- Un asistente amarraba la nariz del dirigible con sus manos al ancla y se alineaba solo con el viento, su comportamiento era como el de un animal, permanentemente amenazaba con regresar a su hábitat celeste. Después de estabilizarlo le colgaban unas bolsas de arena y pesas de plomo, no estaba quieto nunca.
Esta aeronave recorrió las provincias de Bs As, Santa Fe, Córdoba, Mendoza y fue piloteada por al menos 4 personas:
- - Dos argentinos José María Vaca y Rolf Hossinge
(quien fue comandante en aerolíneas Argentinas y uno de los pilotos más
reconocidos del país).
- - Un norteamericano Bob Fowler
- - Un australiano John Fox
El informe de la junta de Investigación de Accidentes de
Aviación Civil dice que el 22 de noviembre de 1996, el dirigible de La
Serenísima debía realizar el vuelo número 1215 para hacer el tramo
Ceres-Rosario con escala en Rafaela por un re abastecimiento.
La tripulación pidió la información meteorológica para el despegue, recibió el informe de las 6hs y el de las 7hs y el comandante no esperó el de las 8hs. El N601 LP despegó 8:42 hs y 18 minutos más tarde el equipo de apoyo, que lo seguía a unos 20km atrás, informa al comandante que el aeropuerto de Rosario se cerraría dentro de las 2hs. El comandante decide cambiar el destino a Rafaela, el equipo se adelantó descubriendo que había un frente frío y no podrían aterrizar, luego se dirigieron a Esperanza y poco después a San Justo (Santa Fe). En la zona del campo Andino fue alcanzado por el frente de frío teniendo que aterrizar de emergencia, la tripulación intentó desinflar el dirigible pero fue arrasado por el fuerte viento y arrastrado 3km donde. Quedó destruido pero el piloto y el copiloto resultaron ilesos.
Testimonios:
- Daniel Galetti (lugareño de Campo Andino): “los
parroquianos de esa época recuerdan que el dirigible se preparaba para bajar en
el campo de la Cooperativa de Consumo del pueblo. No lo logra y llega a la
propiedad de Enrique Trombert. Logran amarrarlo pero se les va para el arroyo
Añapiré, conocido como Saladillo. Es ahí donde no pueden hacer nada ya que su
estructura es dañada. Dicen que existen algunos restos de lona cubriendo el sol
de la comisaría del pueblo”.
- Guillermo Vicario: “Soy de San Nicolás de los
Arroyos, que es la ciudad donde se armó, en el galpón de chapa naval de
Siderar, ex Somisa.
- Lucas Echecopar: En una época estuve trabajando
en Gral. Rodríguez y nos tocó emparcharlo por los balazos que tenía”.
- Lucía Cachazo (vecina rodriguense): “En un día espectacular En una
fiesta Patronal de Nuestra Señora del Carmen, desde el globo arrojaron pétalos
de rosas”.
- Gabriel Chulve: "Pertenecí a la tripulación del dirigible de La
Serenísima, uno de los pocos afortunados que tuvo el placer de trabajar en él.
En principio fue una selección por agencia
de trabajo, donde uno de sus requisitos
excluyentes era hablar inglés fluido, ingresamos un grupo inicial y nos
trasladamos a San Nicolás. Aun no sabíamos de que se trataba el trabajo,
ingresamos en el área donde está la metalúrgica Somisa y tuvimos más incógnitas
puesto que éramos técnicos de distintas ramas incluidos aeronáuticos y ese
lugar tenia de todo menos aviones.
Ingresamos a un hangar y nos encontramos
con una aeronave en proceso de ensamble, fue fantástico. Uno de los primeros
trabajos fue colocar una a una las lamparitas del letrero, eran más de 5000. De
repente parecía una película donde el único lenguaje era el inglés, así
transcurrieron algunos días hasta el vuelo inicial y lo trasladaron a la base aérea
de Palomar. Ahí se realizó una selección de personal y quedamos solo 8
argentinos que trabajamos durante algunos años, era un excelente grupo de
trabajo internacional, aún mantenemos una valiosa amistad.
La única función del dirigible fue
Publicidad, jamás realizó tareas para el gobierno.
En USA se escribió un libro con toda la
bitácora, aporté anécdotas para ese libro, se editó en Inglaterra y lo escribió
un piloto retirado de fuerza aérea británica, cuyo padre participó en la construcción
del blimp desde su hora 0 y el final en argentina.
Se capacitaron 3 pilotos argentinos: Rolf
ossinger, José Baca y Nicolinni. No supe
nada más de ellos y aun mantengo contacto con la tripulación norteamericana.
Estuvo inflado hasta su último día, uno de
los días más tristes, lamentablemente yo estaba ahí. Poco se pudo hacer para
ayudar a los pilotos, el tiempo nos jugó una mala pasada.
Voy a descansar, les agradezco el viaje, dormiré
con una sonrisa en el rostro”.
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